María Fulô

El sábado fuimos a comer comida brasilera con una pareja amiga (la onda es intentar seguir con al ambiente de vacaciones a como dé lugar. ja!
En María Fulô el estilo de cocina es bahiana, y también se ve en la ambientación, en la música y en la vestimenta de los mozos. La atención es muy buena, el personal de contacto tanto como el de cocina son todos brasileros.
Fuimos al patio interno que es muuuy tranquilo, y donde además...se puede fumar!
Ahí nomás le entramos a las caipiras:

Deliciosas caipirinhas de maracujá y de limón a $16 (nos tomamos 2 cada uno!)
La de maracujá es realmente delicada, si bien la de limón también es suave y muy rica, la de fruto de la pasión es una combinación difícil de superar. Vale la pena ir al lugar sólo para tomarse un par de tragos!

Como entrada pedimos, para compartir, una porción mixta de salgadinhos ($20), que son algo así como bolitas rebozadas y mini empanaditas, vienen 6 piezas; y una porción de langostinos empanados en colchón de tomate, que son riquísimos, y también vienen 6.

Después pedimos:
Feijoada (una versión un poco cool del plato típico, digamos una versión palermitana; que si bien estaba sabrosa...le faltaba énfasis)
Bobo de camarão: no, no es corazón de camarón (ja!), sino estofado de camarones con finas hierbas bahianas (excelente! a mi gusto, una de las mejores opciones del lugar, aunque me faltaba la farofa...estuve a punto de reclamarla!)
Moqueca de peixe: abadejo cocinado en olla de barro, con leche de coco, tomates, aceite de dendê, acompañado de arroz blanco (la otra gran opción junto al bobo de camarão, el típico plato brasilero con un pescado consistente, aunque también le faltaba la farofa!)
Bife encevolhado (bife encebollado, rico, pero no necesita demasiadas aclaraciones)
(Todos a un promedio de $35 cada plato)
Tomamos un Voignier para acompañar, si bien había muy buenos vinos, una crítica que le hago a la carta es que de las 3 cervezas que ofrecen, ninguna es brasilera.
De postre no podía faltar el mousse de maracujá ($15), muy rico, aunque demasiado dulce para mi gusto, creo que estaba hecho con leche condensada.
No es barato, pero vale la pena.

María Fulô
Cabrera 5065
Palermo Viejo